Cuidate del Chile (y no es albur, jejeje, es otro tema para lección). Lo que yo he visto con mis amigos que vienen del extranjero, es que cuando uno les ofrece un platillo o unos tacos, normalmente decimos "la salsa está picosa" o "la comida tiene mucho chile". Y adoptan una actitud valiente, y dicen "no hay problema". Pero el problema viene, cuando comen: los ojos les empiezan a llorar, la nariz empieza a moquear ,sudan, pierden la voz y solo se les entiende "agua, agua".
Tampoco es cuestión de privarte de la sensación del chile (otro albur), ese escozor que sientes en los labios, parecido al beso de un dragón (bueno imagino que así sería un beso así), que definitivamente tienes que tener esa sensación.
Solo te digo que tengas cuidado, en especial, con el chile habanero, que a primera vista pudiera parecer inofensivo. Alguna vez (y eso que soy veterano en esto de los chiles), me enchilé con chile habanero, y recobré sensibilidad en los labios y el paladar, hasta después de dos horas. (Se los juro! podía acercar los labios al fuego y yo no sentía nada!)
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